Una celebración de un mes
El Cinco de Mayo no solo es un día de fiesta. Combina una lección de historia en vivo, un festín gastronómico y una celebración del patrimonio cultural de México. Las celebraciones no se limitan solo al día específico: en Puebla, el Cinco de Mayo es un festival que dura un mes. El 5 de mayo, se recrea la Batalla de Puebla en el lugar en el que ocurrió: un colorido desfile de carrozas y participantes vestidos con brillantes trajes típicos recorre las calles. Se muestra toda la historia de México. En las semanas antes y después del día principal (del 2 de abril al 10 de mayo), la ciudad disfruta de festejos con mariachis, tacos y margaritas, además de actuaciones de danza, teatro, música clásica, conciertos de pop y ferias de atracciones en diversos lugares. El Cinco de Mayo también se celebra en Estados Unidos, aunque muchos estadounidenses piensan que representa el Día de la Independencia de México, que se celebra en realidad el 16 de septiembre. Pero olvidemos EE.UU.: no existe un lugar mejor para celebrar el Cinco de Mayo que la ciudad que hizo historia. ¡Nos vamos a Puebla!
Explore la cuarta ciudad más grande de México
El Cinco de Mayo es una gran excusa para viajar a Puebla, pero ciertamente no la única. La cuarta ciudad más grande de México tiene mucho que ofrecer. El centro de la ciudad colonial, lleno de iglesias y conventos, es Patrimonio de la Humanidad. Alce la cabeza para admirar la catedral: las dos agujas son las más altas de México. Puebla también es la capital gastronómica de México. El mole poblano, una salsa picante con chiles y chocolate, procede de aquí. Otro plato originario de aquí son los chiles en nogada, elaborados con salsa de nuez y semillas de granada con los colores de la bandera mexicana. En la cercana Cholula, los aztecas construyeron una enorme pirámide. Es la mayor pirámide que queda en el mundo.